domingo, 26 de julio de 2009

EL ZAHIR


"Un guerrero de la luz nunca olvida la gratitud.

Durante la lucha fue ayudado por los ángeles, las fuerzas celestiales colocaron cada cosa en su lugar, y permitieron que él pudiera dar lo mejor de sí. Por eso, cuando el sol se pone, se arrodilla y agradece el Manto Protector que lo rodea.

Los compañeros comentan: "¡Qué suerte tiene! Pero él entiende que "suerte" es saber mirar a los lados y ver dónde están sus amigos, porque fue gracias a lo que ellos decían como los ángeles consiguieron hacerse oir"


Fragmento de EL ZAHIR de Paulo Coelho

sábado, 18 de julio de 2009

DROGAS PSICOLOGICAS Y VIOLENCIA JUVENIL


"Estamos cansados de esta vida materialista, de que tan sólo se vendan y compren cosas; estamos cansados y hartos de tanta violencia inútil, de tanta sangre derramada porque sí. Estamos cansados de que se nos engañe hoy y mañana y pasado mañana. Queremos simplemente vivir en paz, vivir como los pájaros, vivir como los delfines en el mar, poder jugar y saltar al sol, poder morir cuando sea el día de la muerte y vivir cuando sea el día de la vida.

Queremos volver a sentir la fueza espiritual de Dios, el sol interior que tenemos dentro.

¿Cómo se reafirma la parte moral? ¿Cómo se reafirma la parte espiritual? Aprendiendo nuevamente a reconocer que lo más importante en la vida no es la vida física, sino la vida interior y espiritual. Tenemos que aprender que ese fuego que nos come por dentro, ese mensaje interior que todos llevamos en alguna medida, vale más que este saco de piel y huesos. Y no sólo debemos saberlo, sino que tenemos que vivirlo. Cuando lo hayamos vivido, solamente entonces, podremos entender muchos misterios de la vida.


Podemos también aprender a orar, dirigirnos a los seres superiores, dirigirnos a Dios, poner nuestras rodillas en la tierra y sentir que hay algo más allá del aire y de las nubes, sentir que hay algo que puso orden en todas las cosas, que hay algo que pone orden en nuestro corazón, algo de lo cual emanamos y a lo que vamos a volver".


Fragmentos de la conferencia:
DROGAS PSICOLOGICAS Y VIOLENCIA JUVENIL
Prof. Jorge A. Livraga- Julio 78

domingo, 12 de julio de 2009

EL ORACULO DE LA LUNA


"Por sorprendente que pueda parecer, no es la muerte lo que más miedo nos da.... sino la vida.

Nos aferramos a ella, pero no la vivimos. O, más bien, nos agarramos a la existencia. Pero existir es un hecho, mientras que vivir es un arte.

Somos llamados a convertirnos en los autores de nuestra vida. Como si se tratara de una obra de arte, para empezar, debemos quererla; luego, imaginarla, pensarla; y por último, modelarla, esculpirla, y hacerlo a través de todos los acontecimientos, dichosos o desgraciados, que sobrevienen sin que podamos impedirlo. Aprendemos a vivir como aprendemos a filosofar o a cocinar. Y el mejor educador de la vida es la propia vida y la experiencia que podemos sacar de ella.

Nos da miedo abrirnos plenamente a la vida, acoger su flujo impetuoso. Preferimos controlar nuestras existencias llevando una vida estrecha, acotada, con las menores sorpresas posibles.

El ser humano tiene miedo de la vida y busca sobre todo la seguridad de la existencia. En resumidas cuentas, intenta sobrevivir más que vivir. Y sobrevivir es existir sin vivir....y es ya morir.

Pasar de la supervivencia a la vida es una de las cosas más difíciles que hay. Asimismo, es muy difícil y aterrador aceptar ser los creadores de nuestra vida. Preferimos vivir como ovejas, sin reflexionar demasiado, sin correr demasiados riesgos, sin atrevernos demasiado a avanzar hacia nuestros sueños más profundos, que son, sin embargo, nuestras mejores razones para vivir. Tú existes, mi joven amigo, desde luego, pero al pregunta que debes hacerte es; ¿estoy vivo?

La vía mística es una vía peligrosa. Es peligrosa para los que tienen el espíritu frágil y creerán que se han convertido en Dios cuando simplemente están un poco más locos. Y es peligrosa también para los doctores de la Ley, a quien no les gustan los que tienen la experiencia de lo divino y discuten sus decretos jurídicos.

El camino del hombre espiritual es más amplio y más sencillo. Ese camino no está descrito en ningún libro de ninguna religión, pero coincide en la cima con los mejores itinerarios descritos por los libros sagrados. Todos, hombres, mujeres, niños, ricos y pobres pueden seguirlo

La esencia de la vida espiritual está más allá de la moral y de la religión. Es a la vez mucho más sencilla y mucho más difícil de cumplir. La esencia de la vida espiritual es....decir "sí" a la vida. No con resignación, sino con confianza y amor. Así distinguimos la presencia de Dios oculta en el corazón de todo acontecimiento. La confianza en ese futuro ya en marcha es el motor del camino espiritual. Y su fundamento es la apertura a la vida, a lo bueno y a lo aparentemente menos bueno que esta nos ofrece."


Fragmentos de EL ORACULO DE LA LUNA de Frederic Lenoir

sábado, 11 de julio de 2009

LOS PELIGROS DEL SIGLO XXI



"Ante el crecimiento demográfico, ante la falta de medios y subestructuras, se manifiesta una serie no sólo de apetitos, sino de hambres desatadas que en cualquier momento pueden hacer temblar aún más seriamente nuestra civilización.


Cuando hay grandes apetitos, cuando hay grandes hambres, cuando hay grandes necesidades que provocan procesos de envilecimiento, de caída de los valores humanos, como está ocurriendo hoy en día, se puede llegar a serios enfrentamientos y a la destrucción de la forma de vida que conocemos. Podemos prever que la política será cada vez más corrupta, que los economistas tratarán cada vez de explotar más, que los sacerdotes hablarán cada vez menos de cosas divinas, que los científicos se pondrán cada vez más a disposición de las guerras o de la violencia que al servicio de la paz.


Ante este panorama oscuro ¿qué podemos hacer ante estos peligros del siglo XXI? Sabemos que todo es fruto de lo anterior y que todo se va gestando poco a poco.


Todo hombre, toda mujer, tenga la condición que tenga y esté donde esté, puede hacer algo útil, algo noble, algo bueno; aquel que diga que es demasiado viejo demasiado joven para ello o muy pobre o que tiene problemas, que no es esconda tras excusas. Todos tenemos responsabilidad estemos donde estemos, y podemos hacer algo para la construcción de un nuevo mundo que puede ser mejor que aquel en el cual estamos viviendo ahora.


Todos tenemos, no solamente el deber moral, sino la obligación -y así lo sentimos dentro de nuestro corazón- de hacer que los niños, nuestros hijos, nuestros discípulos, nuestros nietos, vivan en un mundo mejor. Todos podemos colaborar de alguna forma y manera; acrecentando los valores artísticos o literarios, tratando de poner orden donde no lo haya, tratando de poner inteligencia donde no exista, tratando de poner un grano de bondad donde no esté, tratando de hacer algo positivo y efectivo, no solamente en días especiales, sino durante todo el año.


Todos, cada uno de nosotros puede ayudar a sus semejantes y ayudar a enderezar la marcha del mundo. Es obvio que hay grandes intereses creados, que la dificultad es mucha; es obvio que el dragón es muy grande; pero si San Jorge hubiese pensado en el tamaño del dragón, no lo habría matado. Lo fundamental no es pensar en masa, sino ver qué podemos hacer nosotros en el aquí y en el ahora. Lo fundamental es tener la fuerza moral y la resolución para poder hacer algo.


Si se apagasen las luces de una estancia llena de personas, pero una sola de ellas encendiera una cerilla, habría luz, no solamente en la mano del que la portase, sino para todos los que ocupan la estancia. Si en esta gran oscuridad del mundo cada uno de nosotros enciende una sola cerilla de esperanza, una cerilla de efectividad moral, no solamente uno, sino que todos los que están van a participar de esa luz".



Fragmentos de la Conferencia: ""LOS PELIGROS DEL SIGLO XXI"

Prof. Jorge A. Livraga-Dic. 76

lunes, 6 de julio de 2009

FILOSOFIA PARA APRENDER A VIVIR



La imagen puede contener: árbol, planta, exterior, agua y naturaleza

Cualidades esenciales de la verdadera felicidad son la duración y la estabilidad; durar siempre y que ningún contratiempo pueda perturbarla. La felicidad que no reúne estos caracteres es engañosa.




No existe nuestro bien y nuestro mal sino en nuestra voluntad.




De todas las cosas del mundo, unas dependen de nosotros y otras no. Dependen de nosotros nuestros juicios y opiniones, nuestros movimientos, nuestros deseos, nuestras inclinaciones y nuestras aversiones; es decir, todos nuestros actos.




Aquellas que no dependen de nosotros son; el cuerpo, los bienes materiales, la fama, las dignidades y honores; es decir, todas aquellas cosas que no entran en el ámbito de nuestros propios actos.




Las cosas que dependen de nosotros son libres por su naturaleza misma; nada puede detenerlas ni levantar ante ellas obstáculos. En cambio, las que no dependen de nosotros son débiles, esclavas; sujetas a mil circunstancias e inconvenientes y ajenas por completo a nosotros.




Recuerda, pues, que si tomas por libres las cosas que por su naturaleza son esclavas, y por propias las que dependen de otros, no encontrarás más que obstáculos por doquier; te sentirás turbado y entristecido a cada paso y tu vida será una continua lamentación contra los hombres y dioses. En cambio, si no tomas por propio sino lo que realmente te pertenece y miras como ajeno lo que pertenece a los demás, nadie podrá obligarte a hacer lo que no deseas ni impedirte que obres según tu voluntad


Fragmentos de LOS ESTOICOS - EPICTETO