martes, 22 de noviembre de 2016

Inolvidable Alejandro Magno


Para mí he dejado lo mejor: la esperanza.


El verdadero amor nunca tiene un final feliz, 
porque no hay final para el amor verdadero.


Al final, cuando todo se acaba, 
lo único que importa es lo que has hecho." 


Dios es el padre común de todos los hombres.


Vamos a comportarnos de manera que todos los hombres 
deseen ser nuestros amigos y todos teman ser nuestros enemigos.


El final y la perfección de nuestras victorias es evitar los vicios
 y enfermedades de los que sometemos.

Lucharemos para Grecia y nuestros corazones permanecerán en ella.


A través de todas las generaciones de la raza humana, 
ha habido una constante guerra: una guerra contra el miedo. 
Los que tienen el valor de vencerlo, son hechos libres 
y los que son conquistado por él, sufren hasta tener el valor para derrotarlo, 
o se los lleva la muerte.


“Recuerda que de la conducta de cada uno
 depende el destino de todos.” 


Encontrándose al borde de la muerte, Alejandro
convocó a sus generales y les comunicó sus tres últimos deseos:
Que su ataúd fuese llevado en hombros y 
transportado por los propios médicos de la época.
  • Que los tesoros que había conquistado (plata, oro, piedras preciosas... ),
  •  fueran esparcidos por el camino hasta su tumba, y...
  • Que sus manos quedaran balanceándose en el aire, 
  • fuera del ataúd, y a la vista de todos
  • Uno de sus generales, asombrado por tan insólitos deseos, 
le preguntó a Alejandro cuáles eran sus razones.


Alejandro contestó al general:

  • Quiero que los más eminentes médicos carguen mi ataúd
  •  para así mostrar que ellos no tienen, ante la muerte, el poder de curar.
  • Quiero que el suelo sea cubierto por mis tesoros
  •  para que todos puedan ver que los bienes materiales aquí conquistados, 
  • aquí permanecen.
  • Quiero que mis manos se balanceen al viento,
  •  para que las personas puedan ver que vinimos con las manos vacías,
  •  y con las manos vacías partimos.

sábado, 19 de noviembre de 2016

VIAJE DE IDA Y VUELTA POR EL ESPACIO JUNTO AL SOL


Ayer, como tantas veces me ha ocurrido, busqué un libro en mi biblioteca y abrí, qué me responderían... Allí estaba LA RESPUESTA... leí: "En el momento actual nos encontramos en una de esas curvas de la Historia, en un verdadero gozne de la Historia, en donde termina esta Edad de Piscis y en donde ya ha comenzado la Edad de Acuario... Este gozne de la Historia ha roto una serie de conceptos y de creencias, pero no definitivamente. Inercia tienen todos los objetos materiales. ¿quién tendrá inercia dentro de las posiciones ideológicas? El materialismo obviamente.  El materialismo es entonces el receptáculo de la inercia, de las ideas pasadas. Van guardando las ideas del siglo pasado, sin darse cuenta de que el tren de la Historia ha encarrilado de manera diferente, que ya ni está más en los carriles en que ellos creen que está. El tren de la Historia vuelve otra vez sobre sí mismo, y con él vuelven los hombres conscientes de sí mismos."  *

Ya no pude dejar de leer la charla entera... las ideas quedaron en reposo en mi mente, preguntándome y respondiéndome según pasaban las horas.

En el paseo de hoy recordé...y lo viví...claro, no es lo mismo el viaje de ida que el de vuelta...es verdad

Como siempre que emprendía el paseo matinal o al atardecer iba con ganas de caminar, el viento me daba de frente, era un compañero sutil, marchaba adelante con ímpetu, mientras contemplaba el paisaje, el mar, el cielo, el sol, los pájaros, los árboles del paseo, las flores del camino, los niños, las personas que se cruzaban conmigo, cada uno con su historia, me sentía bien, renovada. 

Al dar la vuelta y emprender la marcha en dirección contraria, lo comprendí bien, el viaje de vuelta es diferente, recibimos el viento en la espalda y el sol de frente. Ahora estamos más cansados y según avanzamos cada vez es mayor el deseo de volver a casa. Vamos cargados de vivencias y tesoros, enriquecidos.

Así es...no es lo mismo el viaje de ida que el de vuelta... en la vida, en cada vuelta de la espiral del tiempo y el espacio, tenemos otros vientos, otra dirección, diferentes vivencias, comenzamos una nueva andadura o vamos de regreso al hogar.

No somos los mismos en el viaje de ida que en el de vuelta, únicamente el materialista cambia muy poco o nada, pues su espíritu está dormido y eso no le permite crecer, aprender, evolucionar.  Mientras la Historia sigue su marcha unos van con Ella a su ritmo, otros quedan retrasados, estancados, incluso despedidos por la fuerza del materialismo.

Pero hay algo más... estamos en un gozne de la historia que requiere fuerza moral para pasar a una dimensión superior... lo conseguiremos...espiral tras espiral evolucionando con la VIDA.

"En este giro de la Historia sobre sí misma, como una especie de bumerán ciclópeo, vuelve otra vez a encontrarse. Y no son hombres de vanguardia los que sustentan las ideas del siglo pasado, hoy son hombres de vanguardia los que sustentan las ideas del siglo XXI, de un siglo más descontaminado que el nuestro. Ideas que nos ayudan a sacarnos de encima muchas contaminaciones, para tener otra vez naturalidad en todas nuestras cosas. Y una de las bases de esa naturalidad es que volvamos a reencontrarnos a nosotros mismos. 
Dentro del corazón de cada uno de nosotros camina el hombre que vendrá mañana."
17 nov.1979 *



D.Villegas-Nefertum-18/11/2016
LA ODISEA DEL ALMA

* Jorge Angel Livraga  (fragmento)

 




martes, 15 de noviembre de 2016

Somos Hijos de la Luz

   



No queremos ni vamos a permitir que anulen nuestra conciencia, que nos engañen, manipulen e impongan por la fuerza o sutilmente los vicios, la degradación humana, la violencia, la ignorancia, el egoísmo o la maldad.


Los que han creado un mundo oscuro, en un lugar que podría ser luminoso, donde han llenado de miedo las vidas y han anulado la capacidad de pensar y discernir.  Los sin alma, los que la perdieron hace tiempo porque se vendieron a lo oscuro. Incapaces de sentir nada bueno, destruyen, envilecen y ensucian todo lo que tocan, son lo peor... cuerpos vacíos que ocupan los espíritus malignos que se alimentan de vicios.


Pero gracias a Dios, existen los luminosos, los puros, los buenos, los santos, los ángeles y toda la corte celestial, y también los hombres buenos, valerosos, sabios, que forman el bando de los eternos hijos de la Luz, y ante ellos nada pueden. Ellos son los que velan por nosotros los pequeños, ellos nuestros padre en el cielo, ellos los que nos consuelan y acompañan inspirándonos lo más bello y bueno. Ellos nuestra familia espiritual, nuestra alma, nuestros antepasados, toda la Fuerza de nuestro Espíritu inmortal. Dios les bendice por siempre, porque eligieron con sus acciones, sentimientos, pensamientos e ideales dar cobijo a la luz en sus corazones, mantenerla y transmitirla para beneficio de todos los seres, dando Vida, Salud y Esperanza constante a su alrededor.  Somos  Hijos de la Luz eterna, recuérdalo. Todo lo demás... sombras nada más.





Nefertum- 14/11/2016 

lunes, 14 de noviembre de 2016

Poesía de RUBEN DARIO


La imagen puede contener: flor, cielo, planta, nubes, exterior y naturaleza



Mira el signo sutil que los dedos del viento

hacen al agitar el tallo que se inclina

y se alza en una rítmica virtud de movimiento 

Con el aureo pincel de la flor de la harina

trazan sobre la tela azul del firmamento


el misterio inmortal de la tierra divina


y el alma de las cosas que da su sacramento


en una interminable frescura matutina


Pues en la paz del campo la faz de Dios asoma

De las floridas urnas místico incienso aroma

el vasto altar en donde triunfa la azul sonrisa


Rubén Darío



miércoles, 2 de noviembre de 2016

PENSAMIENTOS DEL EMPERADOR Y FILÓSOFO ESTOICO: MARCO AURELIO



Todas las cosas se hallan entrelazadas las unas con las otras, formando un encadenamiento sagrado, y quizá no haya ninguna que se halle independiente de la otra. Todas están subordinadas y su belleza constituye la belleza del Universo. Porque no hay más que un universo que abraza todo, un solo Dios que está en todas partes, una materia elemental única, una ley que es la razón común de todos los seres inteligentes y una sola verdad, del mismo modo que sólo hay un estado de perfección para las criaturas del mismo género y para los seres que participan de la misma razón " 

No hay nada tan digno de compasión como el hombre que va de izquierda a derecha, que escudriña, como dice el poeta, hasta las entrañas de la tierra y que intenta adivinar lo que pasa en los demás, sin darse cuenta de que sería suficiente para su felicidad ser constante con el alma que reside en sí mismo si le consagrara sincera devoción. Esta devoción consiste en preservar a su alma de las pasiones, de la irreflexión, de toda la vanidad y la impaciencia para todo lo que proviene de los dioses y de los hombres, porque lo que proviene de los dioses es respetable, por su virtud y supremacía y lo que proviene de los hombres lo es también y debe sernos querido, puesto que son hermanos nuestros. Algunas veces, no obstante, debemos tener cierta compasión de estos últimos, por la ignorancia en que se hallan de los verdaderos bienes y de los verdaderos males. Este defecto es tan perdonable como la debilidad de un ciego que no puede distinguir lo blanco de lo negro.




No te dejes embargar demasiado por los acontecimientos exteriores. Abandona esa vida febril de cuando en cuando y dedica momentos de ocio a instruirte en algo bueno. Procura evitar asimismo cualquier otro error. Es una locura trabajar toda la vida si nuestra imaginación y nuestros esfuerzos no tienden hacia un objeto determinado.

Obra, habla y piensa como si estuvieras a punto de salir de esta vida.

La vida más larga y la más corta vienen a ser lo mismo. El presente es de igual duración para todos, y lo que pierdes es también igual, y, en definitiva, sin importancia. El que muere muy joven pierde igual que otro que ha vivido muchos años. Ambos pierden sólo el instante presente, que es el único que poseen, puesto que no podrían perder lo que no tienen.

El alma del hombre se deshonra a sí misma; primero cuando produce en la sociedad los mismos efectos que un tumor en el cuerpo humano, es decir, que se vuelve una partícula molesta en el organismo de la naturaleza. En efecto, enfadarse contra los acontecimientos es como una deserción respecto a la naturaleza, de la que forman parte las naturalezas de los demás seres que la integran. Y en segundo lugar, cuando tiene odio a otro individuo o lo maltrata, como sucede cuando se encoleriza. También se deshonra cuando se deja vencer por el placer o el dolor, cuando emplea la hipocresía, el disimulo y la mentira en sus actos o palabras y, finalmente, cuando no dirige hacia un objeto determinado su conducta y sus esfuerzos, haciendo todo sin cuidado ni orden, siendo así que hasta las cosas más insignificantes deben conducir al mismo fin. Luego el fin de los seres racionales está en vivir conforme a la razón y a las leyes del universo, que es el Gobierno más antiguo y el mejor legislador.

¿Cuál es la duración de la vida del hombre? Un punto en el espacio.¿La sustancia? Variable. ¿Las sensaciones? Oscuras. ¿Qué es el cuerpo? Futura putrefacción. ¿Su alma? Un torbellino. ¿Su destino? Enigma. ¿Su reputación? Dudosa. En una palabra, todo lo que dimana de su alma, como un sueño, como el humo. Su vida es un combate perpetuo, un destierro en suelo extranjero; su fama después de la muerte, un olvido absoluto. ¿Qué es, pues, lo único que puede guiarnos en este mundo? Una sola y única cosa: la filosofía. Esta consiste en velar por el genio que reside en nuestro interior, de suerte que no reciba ni afrenta ni heridas, que no se deje arrastrar por los placeres ni por los dolores, que no haga nada a la ventura, que no emplee los embustes ni la hipocresía, que no cuente nunca con lo que otro haga o deje de hacer, que acepte todo lo que suceda o que le corresponda como procedente de un mismo origen y, en fin, que aguarde la muerte con paciencia y no viendo en ella sino la disolución de los elementos que constituyen el organismo de todo ser viviente. Si estos elementos no sufren daño alguno al transformarse perpetuamente de un estado a otro, ¿por qué ha de inspirar la muerte desconfianza y temor? Todo se halla regido por la naturaleza, luego no hay peligro alguno. "



Marco Aurelio (emperador y filósofo estoico ) fragmentos de PENSAMIENTOS