Cuando lo invisible
e inmortal
llena de luces
el cielo
y lo cubre de maravilla
Creo en Dios
Cuando en la tormenta
el rayo sigue al trueno,
y la lluvia se derrama
desde las alturas
y todo lo purifica
Creo en Dios
Cuando en un atardecer,
de colores puros y bellos
se llena el firmamento
y el Sol en su
último aliento
nos da todo su Ser,
ante aquella sobrecogedora
inmensidad,
Siento a Dios
Cuando veo los ojos llenos
de inocencia y candor
de un niño
en medio de este mundo
de mentira y violencia
Creo en Dios
Cuando en tu rostro
surcado de profundas arrugas
y en tus ojos llorosos
leo tu historia y esfuerzo
Creo en Dios
Cuando contemplo
días tras día
un limpio amanecer
lleno de calma.
Cuando a pesar de nuestros ruidos
y notas discordantes
siento la armonía
y el perfecto equilibrio
de la Naturaleza
Creo en Dios.
Cuando a pesar del dolor
y la incomprensión
el alma ama el Bien
y grita ¡Adelante!
Creo en Dios
Cuando a pesar
de los siglos y
el olvido de los hombres,
el lenguaje misterioso
de otros tiempos
a Algo muy profundo
y simple a la vez
le resulta familiar
Creo en Dios
Cuando incluso
sin hallar
a veces respuestas
el alma confía
y espera segura
recordando no sé que
pedestal firme del ayer
Creo en Dios
Cuando recuerdo
la voz que me enseñó
a conocer mi Fuerza, mi Ser
Creo en Dios
Cuando pienso en tantos hombres
valerosos y desinteresados
de Ayer y de Hoy
que amaron por encima de todo
La Verdad y el Bien
Creo en Dios
Cuando pienso en ti...
siento a Dios
en mi corazón.
Octubre 1981-Gijón-D.Villegas-Nefertum
fragmento LA ODISEA DEL ALMA
No hay comentarios:
Publicar un comentario