miércoles, 13 de julio de 2011

Cartas desde mi Almena (7)

Mi especial amigo:


Hoy te hablaré desde mi corazón...sin más. Hablaba por teléfono hace unos minutos con un "hermano", con quien compartí muchos años de juvenil idealismo… Cuando al despedirse me dijo: "cuídate peque"...no pude remediarlo, querían brotar las lágrimas. Hay personas que irán siempre en nuestra memoria, por todo lo vivido juntas. Los recuerdos no se van nunca...se diluyen por momentos, se desdibujan, o parecen disiparse como el humo...pero no es cierto, están ahí en algún rincón del alma, como una película imborrable. Por eso es tan importante todo lo que hacemos, porque queda impreso para siempre allí y nos va construyendo o destruyendo, según sean sus huellas...

Supe que en la distancia...todo, todo se transforma y se comprende… no es fácil hacerse grande, crecer…en cualquier nivel, ya sea física, psíquica o espiritualmente… Es una lucha interna y externa… ser mejor persona es toda una experiencia iniciática, de verdaderos alquimistas. Y no pensemos que en el presente no está el pasado o el futuro. Aquí y ahora está todo lo que fuimos y seremos... Que despunta como una ramita que surge de la semilla enterrada, poco a poco...inexorablemente.

Todos los que han pasado por nuestra vida, y por los que pasaremos, nos tallan, nos moldean, nos hacen más pobres o más ricos. Y más si nos aman...ese amor es la Vida de nuestra vida...el fuego de nuestro corazón, la chispa de nuestros ojos, la alegría de nuestro corazón...inspiración constante para el alma.

No creas nunca que yo puedo olvidar a quienes amé o me amaron...es algo imposible para mí.

Te quiere siempre tu tierna amiga, que te abraza con esperanza


Perséfone

No hay comentarios:

Publicar un comentario